¿Fin de la zona azul en Oviedo?

Pues va a ser que no.

Hace unos días el Ayuntamiento de Oviedo, con su concejala de Participación Ciudadana, Silvia Junco, a la cabeza y de la mano de una empresa privada "emprendedora" presentaron lo que pretende ser el nuevo sistema de gestión de la zona azul en Oviedo. 

La idea se presenta como una forma de mejorar el tráfico en la ciudad, reducir los costes de control de la zona azul... y no sé cuantas milongas más.

El funcionamiento es el siguiente: a través de una aplicación para móviles (tipo smartphone) el usuario reservará su plaza en la calle en que desee (y haya disponibilidad, claro), abonará la estancia y se dirigirá a la plaza asignada. Una vez allí estacionará en la plaza asignada; si está ocupada por otro vehículo, a través de la aplicación denuncia la situación, se le devuelve el importe y se le asigna una nueva plaza.

Ahora viene la realidad del sistema:

• Supresión del controlador de zona azul, imagino que se irán todos al paro. Será el propio usuario el que delate al infractor (pasarse unos minutos de la hora, por ejemplo); no hay más que dotar a Policía Local y grúa municipal de un avisador automático y a recaudar se ha dicho.
• El usuario ha de encontrarse a una distancia máxima de un kilómetro de la plaza. (la calle Uría mide unos 700 metros, como referencia). Esto provocará la proliferación de vehículos en doble fila mientras el conductor "busca" plaza de zona azul, o lo que es peor, lo hará mientras conduce o en los semáforos. El sistema fomenta el uso del móvil al volante.
• Excluye del sistema de aparcamiento a todos aquellos que no disopongan de un móvil de última generación o no tengan contratado el servicio de internet en el móvil, así como aquellos que no sepan utilizar estas tecnologías. Es lo que se denomina brecha digital, que no es más que ese desnoconimiento que tienen algunas generaciones aceca de las nuevas tecnologías de la información y la comunicación (TIC); tomemos como ejemplo al señor Floriano que deduce que no es posible sacar datos de un ordenador si no tiene puertos USB.

Durante el período de prueba se prodrá estacionar en una calle del Oviedo durante un tiempo máximo de cuatro horas y de forma gratuita. Luego entiendo que las condiciones de uso serán semejantes a las actuales, dos horas y pagando. 

La prueba piloto será un éxito, gratis y durante cuatro horas compensará los inconvenientes del sistema. Luego veremos como el caos se apodera de las calles, accidentes y sanciones por uso del móvil mientras conducimos, vehículos en doble fila... y si no te gusta, te coges un TUA que para eso están (pagando el billete, claro).